Quiero cambiar, ¿puedo?

Al iniciar el año es un buen momento para replantearse nuevos retos, logros y cambios. Creo que es una buena oportunidad aprovechar la motivación que puede generar en uno la posibilidad de tener un año distinto, dejar viejos patrones que nos limitan a vivir una vida saludable, satisfactoria, plena. Hay muchos conflictos inconscientes que pueden dificultarnos crecer en distintos aspectos de nuestra vida. Estos conflictos no se muestran de manera clara, pero se manifiestan en distintos momentos de la vida cotidiana, por ejemplo en la dificultad para formalizar una relación, crecer profesionalmente, confiar en la pareja, inseguridades, pensamientos repetitivos, angustia, depresión, etc. Con la terapia existe la posibilidad de ir entendiendo y conociendo esos conflictos inconscientes y evitar que se manifiesten de una manera que nos perjudique.

El tener ganas de hacer un cambio es muy importante. Cuando una persona no tiene la intención o motivación de entender sus conflictivas, de profundizar en ellas, saber por qué están ahí, de dónde vienen, me parece que es muy difícil lograr un cambio. Sin embargo, si una persona está motivada y tiene curiosidad por conocer aspectos de su personalidad, de su carácter, de su manera de resolver conflictos, tiene el primer paso para iniciar un cambio.

Los cambios no vienen solo del deseo de cambiar, vienen del trabajo y del esfuerzo. Iniciar una terapia no es sencillo. No es sencillo reconocer que uno no siempre puede solo con sus problemas, es una inversión de tiempo y dinero, y puede resultar difícil meterse en la profundidad de nuestra vida mental, al cuestionarnos por qué sentimos como sentimos, por qué actuamos como actuamos, por qué caemos en las mismas dinámicas que nos resultan dolorosas.

Es importante tener en cuenta que todos tenemos situaciones que son difíciles de entender, resolver o cambiar. El tener un espacio para hablar, pensar, entender mejor, y/o darle un significado distinto a situaciones que han tenido cierto impacto en nuestra vida psíquica, con el apoyo de un terapeuta, es lo que permite la posibilidad de cambio.

Siempre es un buen momento para iniciar, para cambiar. Animarse a entender la complejidad de nuestra mente es algo maravilloso. Profundizar en el inconsciente nos permite realmente hacernos responsables de nuestras acciones, de nuestros pensamientos y de nuestros sentimientos.

El cambio es posible, cuando entendemos nuestro inconsciente.

Psic. Ana López

Terapia psicoanalítica

(Imagen de portada: Drawing 2 (After Delacroix/Raphael) Glenn Brown 2019)